La libertad del liberticida
Cristóbal D. Peñate

España se ha convertido en el cuarto país de Europa y el séptimo del mundo en aprobar la eutanasia. En el Congreso de los Diputados solo se opusieron Vox y el Partido Popular.
Es curioso que siempre sea la derecha más recalcitrante la que se opone a las leyes de libertades y avances sociales. Esto suele ocurrir porque anteponen sus convicciones religiosas a los intereses generales de la sociedad.
Hay que recordar que también fue la derecha más reaccionaría de España la que se opuso a la ley de matrimonios homosexuales de Zapatero y López Aguilar. El PP recurrió al Tribunal Constitucional pero, mientras, Javier Maroto se casó con su novio de toda la vida y a la boda asistieron Mariano Rajoy, Cospedal y otros dirigentes del partido. Puro cinismo.
En la transición española la derecha más troglodita se opuso también a la ley del divorcio, aunque luego hipocritamente fueron sus miembros los primeros en divorciarse.
Algo parecido ocurrió con la ley de interrupción voluntaria del embarazo o despenalizacion del aborto, aunque luego fueran a abortar las mujeres que se oponían a su legislación.
La derecha española cae mucho en estas contradicciones. Se opone a leyes de amplio consenso social sin argumentos sólidos pero luego, una vez aprobadas, sus miembros son los primeros en probarlas. Da la impresión de que solo lo hacen para fastidiar y llevar la contraria porque de lo contrario no utilizarían nunca una ley que han rechazado.
Es paradójico comprobar que los que más presumen de liberales y que tanto dicen que defienden las libertades son luego los primeros en cercenarlas.
Ninguna de estas leyes obliga a nadie a practicarla, solo a respetarlas. La ley del aborto no obliga a abortar, la ley del divorcio no obliga a divorciarse, la ley de matrimonios entre personas homosexuales o lesbianas no obliga a nadie a casarse con personas de su mismo sexo. Y por supuesto la ley recién aprobada de la eutanasia no obliga a nadie a morir voluntariamente.
Se trata solo de derechos y libertades ciudadanas. Cada uno tiene sus principios y no está obligado a incumplirlos. A nadie se le fuerza a ir en contra de su conciencia con estas leyes.
Estas leyes sociales solo amplían los derechos de los que quieran acogerse a ellos pero a nadie se le obliga a practicarlas. No se puede propugnar y reivindicar la libertad si no se cree en ella.
Cristóbal D. Peñate es periodista.
A. Suarez
Una curiosidad. El gobierno nos dirá el verdadero numero de personas que harán uso de ese nuevo gran derecho que es la eutanasia o nos mentirá como con las mas de cien mil muertes por COVID.(Segun el gobierno solo setenta miI). En el año de la pandemia con miles de muertos y una ruina economica, la izquierda esta orgullosa de una ley de muertes. Menos mal que nos queda Ayuso.
Ray Moreno
Puede que sea la única vez que coincida con el Sr. Peñate. Cosa curiosa!. Pero es el resultado de defender ideas independientemente de donde vengan y de quien las plantee, algo poco habitual hoy día. Eso si, como liberal, "me duelen los oídos" cuando oigo al PP o C's definirse como liberales. Vaya!! Otra cosa en la que podemos estar deacuerdo...